“Deja de rogar amor: elige dónde te quedas y a quién le das tu energía”
Deja de rogar amor, elige donde quedarte y a quien le das tu energía y amor …
Llega un momento en la vida en que simplemente te cansas, cansada de justificarte, de explicar quién eres, de esforzarte para que te vean, te valoren, te elijan,
cansada de sostener vínculos que no te sostienen.
Te desgasta dar amor donde no hay reciprocidad, invertir tiempo en quien apenas te dedica atención,
esperar gestos que no llegan y palabras que nunca se dicen y llega un punto en que entiendes
algo simple pero poderoso:
No puedes obligar a nadie a valorarte, pero si puedes decidir donde ya no quedarte.
Ese momento, aunque duele, es el primer paso para tu libertad emocional.
Deja de forzar lo que ya no nace
1- No se trata de que no seas suficiente:
Durante mucho tiempo creíste que si dabas más , si eras más paciente, más comprensiva o más fuerte, te valorarían,
pero no funciona así.
No importa cuánto te esfuerces: El amor que no nace solo no puede ser forzado,
No es tu falta de valor, es la falta de visión de esa persona y entender eso cambia todo,
porque dejas de culparte y de sufrir por lo que no depende de ti.
2- A veces quedarse es una forma de irte de ti misma:
Cuando insistes en lugares donde no te valoran, el precio es alto: pierdes tu brillo, tu voz, tu calma, te conviertes
en alguien que camina en puntillas para no molestar, callas tu voz para no incomodar, para ser suficiente, para no ser «demasiado»
Y eso es una de las peores maneras de abandonarte a ti misma.
No te quedes donde tienes que achicarte para encajar.
3- El acto más valiente es elegirte:
Soltar no es rendirse, soltar es reconocer que ya diste demasiado, que ya intentaste, que ya agotaste todas las formas
posibles y que ahora toca elegirte.
Elegirte no desde el orgullo sino desde la dignidad, porque quien se ama no mendiga cariño, se retira con paz.
💡Consejos prácticos para sanar y empezar a vivir sin expectativas
1- Deja de justificar las migajas:
Cada vez que encuentras excusas para el desinterés o la indiferencia de alguien, estas justificando tu propio dolor,
no lo hagas más. El amor se siente no se ruega.
2- Aprende a leer los silencios:
El silencio también comunica, si alguien no te busca, no te escribe, no te cuida, ahí ya tienes la respuesta.
No esperes grandes gestos donde ni siquiera hay presencia.
3- Vuelve a ti:
Cuando alguien ya no te valora, el antídoto no es seguir insistiendo, es regresar a ti misma,
llenarte de todo aquello que te hace bien, volver a tus pasiones, a tus tiempos, a tu esencia.
4- No vivas esperando, vive eligiendo:
Esperar a que alguien cambie es una forma de vivir en pausa, elegir irte cuando algo no te hace bien es una forma de
volver a la vida, de priorizarte y enfocarte en lo más importante, tú mismo/a.
5- No cierres tu corazón , solo sé más consciente:
Cerrar el corazón por miedo no te protege, te congela, te quita la posibilidad de encontrar algo mejor,
el aprendizaje no es endurecerte, es aprender a amar sin perderte nuevamente.
Dejar de ser vista por otros para volver a verte a ti
Un día simplemente lo entiendes, que no puedes obligar a nadie a ver tu valor,
que no se trata de cambiar para gustar, se trata de saber quién eres y dejar que se quede quien realmente te vea y te valore.
Y entonces ese cansancio que antes dolía se convertirá en fuerza,
esa tristeza se transforma en claridad,
Y ese vacío empieza a llenarse de ti mismo/a.
No puedes controlar quien te valora, pero si puedes decidir nunca más quedarte donde tengas que rogar ser vista,
porque la verdadera paz llega el día en que dejas de correr detrás de quien no te elige y empiezas a caminar hacia quien siempre estuvo esperándote: Tu mismo/a
Hasta la próxima mis queridos lectores.
Los abraza a la distancia LEXI.
